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Las fuertes precipitaciones siguen causando estragos en el país y también al beisbol venezolano. Por cuarta jornada al hilo, la LVBP tuvo que posponer un encuentro motivado a las lluvias.

 El moderno Estadio Jorge Luis García Carneiro resultó fuertemente afectado por toda el agua acumulada y pese a la ardua labor del personal de mantenimiento, no se pudo recuperar y poner en condiciones óptimas como para disputar el partido de pelota.

Fue así como después de una extensa espera y trabajos continuos en el terreno, los umpires decidieron decretarlo como pospuesto, aproximadamente a las 6 de la tarde, tres horas más tarde de lo estipulado en el calendario inicial de la liga (3:00 pm).

Caribes y Tiburones todavía no han podido medirse en la actual campaña 2022-2023, pues el pasado miércoles 26 de octubre tampoco lograron hacerlo en el Estadio Universitario de Caracas, producto de los aguaceros que han azotado la región central y centro occidente del país.

La LVBP anunciará de manera oportuna la reprogramación del encuentro.